Cazado y Disciplinado.

Comenzamos a chatear a partir de una pagina de osos de Argentina, bastante conocida, el me agrego queriendo curiosear algo mas acerca de mi y de mi tatuaje. Yo acepté. Estaba en una relación difícil yo en ese momento pero el también tenía su relación propia y ya consolidada, eso fue algo que me gustó porque no hablaríamos de cosas por ejemplo: “¿Sos activo ó pasivo?”, “¿Y que te gusta en la cama?”, etc. Así que pronto nos agregamos al MSN y dimos rienda suelta a la charla, yo conté algo de mi vida y ellos algo de la suya, tranqui siempre hasta altas horas de la noche y tempranas horas de la mañana. Así nos fuimos conociendo de a poco. El se burlaba de mi “Uruguayez” y yo de su “Argentinidad”, bromas sanas para amenizar la noche… Ambos nos re colgábamos a chatear y a vernos por cam, siempre hubo algo de atracción por mi parte pero yo cuando me enamoro me centro en esa persona y en nadie mas. Ellos decidieron adoptarme y pasaron a ser mis papás postizos argentinos. Un par de meses nos distanciamos por causas obvias, uno siempre le da más bola a sus relaciones que a sus amigos de Chat. Ese tiempo paso y mi relación se empezó a desgastar, pero nunca perdimos mucho el contacto, eso fue lo lindo, mientras cada día mas entrábamos en confianza el uno con el otro se empezó a hablar de cosas mas atrevidas pero siempre con el freno de nuestras relaciones, las charlas llegaban hasta cierto punto… Un día para mi sorpresa mi “papi” queda soltero y algo así como de la noche a la mañana yo también. Eso hizo que nos viéramos envueltos en una situación completamente distinta: charlas más frecuentes, mas largas, más interesantes y por sobretodo una mayor atracción. Los días pasaban y aumentaban las ganas de conocernos pero por uno u otro motivo no se daban quien sabe porque y como quien no se da cuenta ya estaba comprando los pasajes. Buenos Aires fue otra vez el destino, se repitió la historia, pero dicen que cuando el de arriba te saca algo que tuviste poco solo te esta entrenando para que puedas cuidar de un regalito mejor… Filas, papeleo, transas, stress se hacían presentes de nuevo como ya era costumbre. El viaje; pesado como siempre… Pero la llegada fue reconfortante sin dudas ya con el primer vistazo alcanzo para saber que es mas hermoso de lo que parecía en la cámara Web. Llegue con mucha hambre, en el amplio sentido de la palabra. Mientras mi bonito compañero había ya adoptado su forma de guía turístico yo lo miraba de costado mientras el se distraía mirando hacia la ventana del taxi, eso también aumentaba mi hambre, en el amplio sentido de la palabra ja. Llegamos, cenamos, tomamos charloteamos un rato hasta que yo me decido a parar para ir al baño a mear. Mis ganas de besarlo eran ya inocultables, tanto que al pasar por detrás de el en mi camino hacia el baño, pasé mi mano por su grandote y fuerte lomo. Tiré la cisterna, me mire al espejo y me dije a mi mismo: “¡’Ta tiene que ser ahora!”. Salí del baño y para mi sorpresa estábamos casi hablando en la misma sintonía con aquel choque de miradas y sonrisas nuestras, así fue, avancé y pregunte con un dejo de picardía en mi rostro: “¿Qué pasó?” pero ambas sonrisas no se borraban de las caritas ya algo desesperadas entonces sin mas nos besamos ahí mismo en el living, un largo rato, fue algo muy lindo y bueno lo que sigue fue algo casi secuencial, ja. Dormimos, nos levantamos y comenzó mi Tour por la ciudad, una muy hermosa por cierto… Algo que recuerdo muy bien fueron las gotitas de transpiración que corrían por su frente, no vi mi cara pero apuesto a que se me caía la baba ahí mismo.
Dicen que del amor no se vive y dicen que la violencia no lleva a nada, pero en este caso fue la combinación perfecta, fue la pócima que me llevo a un estado desconocido por mi hasta entonces, me sentí en la cima del mundo cuando sus chorros hirvientes de aquel elixir dorado impactaban ferozmente recorriendo mi totalmente poseído cuerpo. En fin, fue algo así como mi versión de el paraíso terrenal, pero duro poco… mi estadía allá fue corta para nuestra desgracia, hasta el día de hoy me pregunto si nos volveremos a ver. Y bueno hoy por hoy siempre que llego a casa y miro mis correos siempre encuentro un de él preguntando como me fue en el día y creo que hasta me cuesta dormir si el no me da las buenas noches, pero yo soy así medio bobo.

Cazadorcito{Tigre}